Una guía rápida para elegir cualquier disfraz de Halloween

 ¡Ya estamos en octubre! Lo que significa que, además de estar terminándose el año, Halloween está muy cerca. Si bien hace unas décadas celebrar esta fiesta estadounidense era objeto de discusión, hoy en día son cada vez más las personas de todas las edades que ven en Halloween una oportunidad perfecta para todo tipo de fiestas.

Las más comunes de ellas son, obviamente, las fiestas de disfraces para adultos. Aunque en Estados Unidos y otros países del norte mundial Halloween aparece como una fiesta igualmente infantil que adulta, aquí en Chile se mantiene como una fiesta más celebrada por adultos.

Por eso, en esta oportunidad, les traemos una guía rápida para elegir un disfraz. En vez de recomendarles un disfraz específico u otro, elegimos dar una guía general que les va a ser útil en la elección de cualquier disfraz.

Originalidad

Vamos a empezar por la originalidad. No estaríamos exagerando si dijéramos que esta es la parte más importante de un disfraz: los disfraces originales , cuando están bien hechos, superan por mucho a los caros pero comunes.

De hecho, algunos de los mejores disfraces son los más fáciles de hacer. Todo está en la originalidad. Una buena parte de la gracia de un disfraz está en ese momento en el que el otro entiende la referencia y logra entender de un tirón el atuendo que lleva puesto el otro.

Entonces, un buen disfraz tiene dos partes: por un lado, tiene que entenderse, hacer referencia a algo, ya sea un personaje, como por ejemplo Sherlock Holmes, o un género de personajes, como podrían ser los detectives. Esto hace que tener ideas de disfraces para Halloween que tengan una buena referencia sea una cuestión esencial.

Por otro lado, más allá de su referencia la otra cara del disfraz es la ropa en sí, es decir, lo bien que esté el atuendo más allá de la referencia.

Practicidad

Sin lugar a dudas, lo práctico de un disfraz es muchas veces tenido en cuenta tarde, cuando ya estamos en la fiesta sin oportunidad de arrepentirnos de haber elegido esa entre las muchas ideas de disfraces.

 Al momento de pensarlo, el estilo y el acabado final es el punto central en el que pensamos y buscamos, pero cuando llega el momento de efectivamente ponernos el disfraz, no tener en cuenta la practicidad puede costarnos caro.

Por eso, los disfraces sencillos están entre los más usados, en especial en el caso de los adultos.

Con practicidad nos referimos no solo a la comodidad del disfraz en sí, sino también a que tan conveniente es tenerlo encima.

 Un disfraz de fantasma, por ejemplo, es cómodo de usar pero llevarlo puesto puede hacer que nos tropecemos o llevemos por delante algunas cosas en los festejos de Halloween.

Volviendo al tema, al pensar el disfraz siempre hay que tener en cuenta que vamos a tener que llevarlo puesto por un par de horas.

Como podrán imaginar, esto se vuelve todavía más importante en el caso de las fiestas de disfraces adultos.

Por eso, podríamos decir que un disfraz es un compromiso que tendremos que cumplir, al menos por lo que dure la fiesta.

 Esto no quiere decir que los disfraces elaborados no tengan su gracia. Si bien no son pocas las personas que prefieren sacrificar practicidad por llevar disfraces originales, siempre es bueno que esta sea una decisión informada.

Los materiales

En cuanto a la comodidad, ya sea en un disfraz o en la ropa en general, los materiales cumplen un rol clave. Esto puede ser pasado por alto al momento de comprar disfraces prefabricados, los cuales en muchos casos ahorran en materiales.

Si hablamos de la tela, el algodón se mantiene como uno de los materiales más cómodos. La ropa (y disfraces) hechas con un alto porcentaje del algodón suelen ser ligeras, frescas y transpirables.

Esto último aparece como fundamental si tenemos en cuenta que en el hemisferio sur, Halloween tiene lugar en la mitad de la primavera, donde puede hacer bastante calor según el día y la zona.

Por otro lado, las telas de PVC o vinilo son muy comunes en disfraces fáciles. Estas son derivados baratos del plástico, y aunque esto no es un problema si se usan en capas u otros elementos del disfraz que no vayan pegados a la piel, puede complicarse si es una parte principal del disfraz.

Tanto el PVC como el vinilo son telas que no dejan transpirar al cuerpo. Esto quiere decir que el aire y la transpiración no pueden pasar fácilmente por ellas.

Esto puede generar una sensación muy incómoda, en especial en días calurosos. Entonces, nuestras ideas de disfraces para Halloween nunca deberán pasar por alto los materiales.

El calzado

Otra parte que no suele ser tenida en cuenta es el calzado. Todos sabemos lo terrible que es un calzado incómodo: puede arruinar fácilmente el humor, sin hablar de una fiesta.

Por todo esto, el calzado es una de las piezas claves a tener en cuenta en los disfraces para Halloween.

 Aunque puede ser tentador elegir unos zapatos de vestir que hagan juego con nuestro disfraz de mafioso, o unos tacos altos que vayan perfecto con el disfraz de princesa, a menos que uno lleve una mochila con sandalias, probablemente nos arrepintamos después de un par de horas.

Entonces, en los disfraces para halloween hombre lo ideal sería evitar el uso de zapatos de vestir o botas apretadas, los cuales pueden ser reemplazados con zapatillas.

En el caso de que las botas o los zapatos de vestir sean totalmente necesarios para el disfraz, una opción podría ser llevar un cambio de zapatos para cuando empiecen a molestar.

Por otra parte, en cuanto al calzado en los disfraces para halloween mujer, todo esto aplica de igual manera, aunque las mujeres ya deben estar más acostumbradas al concepto de los zapatos de repuesto.

Si vamos a sacrificar una parte del disfraz a favor de la comodidad, el calzado aparece como la opción más inteligente. Una alternativa también es pensar un disfraz que casualmente incorpore unas zapatillas cómodas, pero les dejamos que lo piensen ustedes.